Mujer de 28 años se vuelve millonaria vendiendo uñas, ropa interior usada y piel muerta de sus pies

Rebekka Blue se ha convertido en millonaria vendiendo distintos deshechos de su cuerpo al mejor postor: desde uñas, piel muerta, caspa e incluso un dispositivo intrauterino usado. En un contexto en el cual OnlyFans ha normalizado muchos fetiches, la exbailarina exótica habló de su forma de trabajo mediante una serie de videos virales en TikTok y no ha tardado en llamar la atención de los usuarios, muchos de los cuales no terminan de entender cómo es que hay gente dispuesta a pagar tanto dinero por residuos.

La joven de 28 años de Wilmington, Carolina del Norte (Estados Unidos), ha revelado que comenzó vendiendo hisopos usados a 5 dólares cada uno. Desde entonces ha recorrido un largo camino y diversificado los objetos que ofrece, hasta ganar entre 5.000 y 10.000 dólares al mes. En los últimos diez años, la joven habría recaudado la sorprendente cantidad de 1 millón de dólares.

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“Si vamos al salón a arreglarnos los dedos de los pies, pido que nos quedemos con las chancletas y los separadores de uñas”, explicó Blue en uno de sus videos. “Incluso vendo mi basura, lo que demuestra que la basura de una persona es el tesoro de otra”, añadió.

“Fue una obviedad continuar compartiendo mi experiencia en las redes sociales, lo que sin dudas no solo hizo crecer mi negocio, sino que me permitió iniciar una empresa de entretenimiento”, dijo, y agregó que ahora vende sus productos a tiempo completo. “Me ha permitido contratar personal”, detalló.

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Rebekka Blue y las dificultades de la industria

Aunque pueda parecer un trabajo sencillo, algunas de las peticiones que recibe por parte de sus clientes son realmente extrañas. Un tipo le pidió una prueba de embarazo usada para simular que tenía una esposa y que esta le estaba revelando la llegada de su bebé. Otro le pidió un pañal sucio, aunque Blue dice haber rechazado esa petición.

“La gente piensa que es una locura, pero estoy vendiendo esperanza, alegría y amor a la gente en un ambiente seguro”, dijo Rebekka, quien ha reinvertido parte de sus ingresos para crear una empresa de fabricación de cuchillos centrada en las mujeres llamada Blades For Babes. Incluso escribió un libro titulado "Secretos de una slutrepreneur: las claves para iniciar su imperio de comercio electrónico".

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“El objetivo es tener más derechos para nosotros porque este es un negocio legítimo y merecemos ser tratados como dueños de negocios”, concluyó.